Hoy, 20 de enero, treintavo día de nuestra estancia en Kolkata, estoy como anonadada, tengo la sensación de estar totalmente ida, exactamente no estoy en el Cielo y tampoco en la Tierra. El bullicio de las personas me agobia, sin embargo el caos de Kolkata me está empezando a relajar, lo único que me apetece es pasear por las calles, esquivar todo tipo de vehículos y aguantar siempre a una persona que se pega a tu lado como un siamés para llevarte a su tienda, mientras no para de hablar aunque no entiendas nada de lo que dice. Es alucinante como en tan poco tiempo y con tanta diferencia con respecto a España he podido acostumbrarme a estas situaciones y sentir una sensación relajante en medio de tanto caos.
Hoy he vuelto a pasear por las tiendas e incluso he buscado un centro comercial sola, bueno más o menos sabía donde estaba, aunque hasta hace pocos días todas las calles me parecían iguales y me perdía, jajajaja!!!
El ser humano tiene una capacidad de superación sin límite, aun en momentos de la vida en que muchas cosas carecen de interés, como es mi caso, con la mente perdida, sin pensar en nada, simplemente dejándome llevar he encontrado la tranquilidad en esta ciudad de pobreza, suciedad y contaminación. Kolkata, sus gentes, esta llena no solo de fealdad, sino que te sorprenden lo inteligentes que pueden llegar los que habitan aquí, a veces se hacen los suecos porque no les interesa entenderte, pero… hacen bien.
He querido coger un rickshaw para la Casa de la MADRE TERESA, pero mi sorpresa ha sido mayúscula cuando he visto que habían cambiado el sentido del tráfico de la calle y no sabía donde podía cogerlo. Ya sabía que por las tardes cambiaban el sentido del tráfico, algo difícil de imaginar en España; pensar que por la mañana salgo de mi casa y por la tarde cuando llego ya no tengo acceso por la calle. Al final he recurrido al socorrido y siempre disponible taxi.
El medio de transporte que más me gusta es el autorickshaw, va por el carril del tranvía, dando unos saltos que parece que vas a salir volando, a toda velocidad como en una competición, con la música para romperte los tímpanos, parece una discoteca rodante, es realmente emocionante, tanto que engancha.
Hoy, dentro de las pocas horas que tiene el día, me ha cundido: he visitado la Casa de la MADRE TERESA, he hablado con la Hermana María durante mucho tiempo y me ha ayudado mucho su conversación, he visitado la tumba de la MADRE TERESA, también la capilla y para volver… autorickshaw, jajajaja!!! He ido de “driver”, al lado del conductor, cuando giraba me tenía que apartar para hacerle hueco porque apenas tiene espacio para maniobrar el volante de la moto, hacia la derecha, hacia la izquierda, con medio culillo fuera y agarrada al retrovisor, a una velocidad de vértigo, menos mal que tienen unos reflejos alucinantes.
He paseado mucho durante la mañana, sola pero relajada. Antes de comer Josep y yo hemos tomado una cerveza en el Fairlawn, haciéndonos la idea que estábamos tomando el aperitivo como en España. Después tranquilamente al “Blue Sky”, ya me gusta y todo, la gente es muy amable incluso alguno vacila conmigo, pero como mis conocimientos de inglés son cero, pues no se que me dicen. Lo más gracioso es cuando aparezco por la puerta al estilo Michael Jackson, con gafas de sol y la boca muy tapada, jajajaja!!! Eso les debe hacer mucha gracia.
Un café en un buen sitio y paseando por las calles tranquilamente ha sido como un bálsamo para mi, lo necesitaba porque mucho bullicio de gente me quita la energía y hablando mi mismo idioma, no es mi momento.
He cenado también en el “Blue Sky” y ha sido un día completo…, volveré si LAURA me vuelve a invitar, jajajaja!!!
LAURA, no quería hablar hoy con la Hermana María y he hecho lo posible para llegar más tarde de la hora a la que suele estar ella disponible, sin embargo ha aparecido en el momento que yo la necesitaba. Gracias cariño, te quiero con toda mi alma, el día que realmente me sentiré feliz será el día en que pueda volver a abrazarte y estar contigo, diciéndote: “LAURA, cuidado con la comida, lávate las manitas…” jajajajaja!!! Así quiero estar un ratito contigo y tu diciéndome: “Mamá que pesada eres”, jajajaja!!! Se que llegará y lo volveremos a vivir en el Cielo.
Siempre LAURIINA, ya nos queda muy poco para visitar tu jardín, comer allí unos garbancitos, tomar un poco de vino, un buen postre y un café.
Lo más importante de todo es que Kolkata empieza cuando llegue a Madrid, allí viviré Kolkata.
TE QUIERO MI PEQUEÑA LAURA, GRACIAS UNA VEZ MAS.